Hola, mi nombre es Karla y quiero contarte un poco de mi historia.

Desde que era muy pequeña me gustan mucho los animales, tuve muchos de mascotas como: una tortuga, un hámster, un patito, pollitos, peces y perros.

Mi mamá siempre cuenta la anécdota de que cuando era niña, una vez no quería hablar para no tener que abrir la boca, hasta que se dieron cuenta que tenía un caracol y les dije que lo tenía guardado porque tenía frío

Siempre dije que quería ser veterinaria y nunca me vi haciendo otra cosa. Ahora que lo soy, sé que no me equivoqué en haber tomado esa decisión.

Aunque al inicio de mi profesión me topé con una realidad dolorosa al tener que eutanasiar pacientes o no poder salvar a otros, siempre en mi mente existe el pensamiento de esforzarme cada vez más para que esos casos sean menos. Hasta el día de hoy siento que lo he hecho bien pero todavía quedan muchas metas por lograr por el bien de los animales.